El jamón ibérico es un producto delicado y requiere de una cuidadosa conservación para mantener su sabor, aroma y textura. La forma en que se conserva el jamón ibérico es crucial para su calidad y su durabilidad.
Así que si quieres comprar jamón ibérico, también necesitas saber cómo conservarlo. De ahí que hayamos elegido este interesante tema en esta ocasión. Para que al momento de consumirlo puedas disfrutar de todos y cada uno de sus matices de sabor. Y para que su textura y sus propiedades no se pierdan.
El jamón ibérico se cura naturalmente con la combinación de la sal, regulando la humedad abriendo y cerrando ventanas, ayudados por el clima. La sal es un conservante que ayuda a prevenir el crecimiento de bacterias y moho. Los niveles de humedad son esenciales para mantener la textura y el sabor del jamón. Y un clima fresco y seco permite que el jamón se cure correctamente.
Y una vez que llega a casa y queremos conservarlo…
En primer lugar, debemos diferenciar si el jamón ya está empezado o bien lo mantenemos en la caja con sus papeles o fundas de protección.
Si aún no lo hemos abierto, debemos dejarlo en un lugar fresco y sobre todo seco. De esta manera podremos evitar la proliferación de moho o incluso algún ácaro que puede aparecer en la superficie de la pieza. Si se diera el caso, podemos limpiar dicha superficie antes de empezar el jamón, frotando suavemente la misma con aceite de oliva hasta que esté limpio.
Si lo que buscamos es conservar un jamón que ya hemos empezado a cortar, debemos dar dos pautas principales:
–El jamón se va a ir resecando exclusivamente por la o las zonas abiertas, por lo tanto debemos protegerlas especialmente para que no se oxide dicho corte abierto durante los intervalos de tiempo en los que no estamos loncheando el jamón o paleta ibéricos.
-Aunque lo protejamos muy bien, lo óptimo es que el tiempo de consumo de una pieza, sea siempre el mínimo.
Y como método de protección del corte abierto, recomendamos utilizar la propia grasa o tocino sobrante de la pieza. Nos referimos al tocino arranciado o amarillo, que cortaremos en grandes y largas “rebanadas” longitudinales, para colocarlo después sobre el corte abierto y que así se tenga una protección frente a la posible oxidación.
Si vemos que ya han pasado muchos días y por ello ese tocino ha ido perdiendo “frescura”, lo que podemos hacer es tapar bien el corte con film plástico, lo más pegado posible para evitar que haya aire, y cubrir después con un paño limpio para que no le de la luz al corte abierto.
Si sigues estos consejos, te asegurarás de que el jamón ibérico conservará toda su calidad.
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¿Cuánto tiempo se conserva un jamón ibérico?
En general, se puede decir que un jamón ibérico no caduca, sino que tiene una fecha de consumo preferente. Pero lo ideal una vez abierto es consumirlo en un plazo máximo de uno o dos meses para que no se reseque ni pierda sus cualidades, pero repetimos que lo óptimo es un periodo mínimo. Como consejo, desde PATABRAVA preferimos que se compre un jamón cada mucho tiempo, pero que una vez en casa se corte rápidamente y se disfrute, respecto a tener un jamón abierto durante mucho tiempo. Buscamos el disfrute del cliente, y la que indicamos es la manera correcta.
Por supuesto, hay que evitar consumir jamón ibérico cuyas lonchas se hayan cortado previamente con demasiada antelación, puesto que se van a resecar rápidamente y no disfrutaremos en plenitud de un buen jamón ibérico.
Esto lo solemos observar en algunos eventos, donde no está bien dimensionado la cantidad de cortadores con el número de invitados, por lo que proceden a dejar cortado jamón en platos previamente, y así poder evitar largas colas frente al cortador.
Si el jamón loncheado está envasado al vacío o en atmósfera modificada, puede durar hasta 9 meses sin mayor problema, conservándolo adecuadamente en refrigeración. (de 2 a 8 grados centígrados).
Condiciones ideales de conservación del jamón Ibérico
Quizás estas recomendaciones no te hagan falta, si el jamón ibérico es tu pasión como nos ocurre a nosotros, lo consumirás enseguida. Pero por si acaso crees que va a durar abierto un tiempo, estos consejos te vendrán genial.
Por último comentar que un jamón ha de estar siempre “atemperado” para su consumo, es decir que no disfrutaremos de él si está frío o simplemente no está a la temperatura suficiente como para que “sude”.
Y recuerda que en PATABRAVA disponemos de una funda de neopreno para las piezas más especiales, con la que aumentarás la protección de un jamón ibérico de bellota DOP Guijuelo aún más allá del tiempo usual, por mantener mejor los niveles de humedad correctos.
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